Para unos Juegos Olímpicos que aseguran ser "los más verdes", en una ciudad que trata de ser "la más verde", bajo un gobierno que promete ser "el más verde", hay muy poco verde cuando llego a la sede de las Olimpiadas de 2012, en Londres.Los colores dominantes son el gris -de los escenarios que ya están construidos y del cielo, donde los vientos invernales cargados de nieve se vislumbran hasta el horizonte- y el marrón de la industria de la construcción.
Honestamente, todavía parece más un lugar en construcción que un parque lleno de vegetación.
See full Article.
